El flamante Aston Martin DB12 hace su aparición en el 110 aniversario de la marca, al igual que en el 75 aniversario de la icónica placa DB. Este primer “Super Tourer” se basa principalmente en su predecesor, pero incorpora una amplia variedad de mejoras en el sistema de propulsión, chasis e interior.
Aston Martin DB12, levemente redisenado
Desde el punto de vista visual en el exterior, el cambio más relevante ocurre en la parte delantera. La nueva parrilla más agresiva, con una entrada de aire ampliada y faros con tecnología LED Matrix, le otorgan una apariencia rejuvenecida. Esto es prácticamente todo lo que vale la pena destacar. A partir del pilar A hacia atrás, el DB12 mantiene en líneas generales la misma apariencia que su predecesor, el DB11.
No obstante, en el aspecto interior, la historia cambia radicalmente. Es en este ámbito donde las modificaciones de diseño son mucho más evidentes. La antigua plataforma de entretenimiento de Mercedes ha sido sustituida por una completamente nueva, totalmente personalizada, diseñada y programada por la flamante división de software.
Una pantalla táctil de 10.25 pulgadas es ahora el elemento central de la cabina. Se sitúa sobre una consola central inclinada conocida como “cascada”. Aston Martin afirma que se trata de la pantalla con mayor resolución de su categoría y que responde a las entradas táctiles en tan solo 30 milisegundos.
Una buena noticia es que el Aston DB12 conserva múltiples interruptores físicos para las funciones más cruciales. Esto es acogido con agrado en un sector automotriz donde estos han desaparecido y las funciones se han convertido en un problema de accesibilidad oculto dentro del sistema de entretenimiento.
Sistema de propulsión renovado
En lo que respecta al sistema de propulsión, el DB12 deja atrás el V12 y adopta la última evolución del motor V8 de 4.0 litros biturbo de AMG. Para el Aston, el bloque ha sido configurado para producir 680 hp y 590 lb/pie de torque. La transmisión ZF de ocho velocidades se mantiene, pero el diferencial de deslizamiento limitado mecánico es reemplazado por una unidad electrónica que, según Aston, pasa de totalmente abierto a 100 por ciento bloqueado en cuestión de milisegundos, mejorando así la precisión y la consistencia en la conducción. Estas mejoras se traducen en una aceleración de 0 a 62 mph en 3.6 segundos y una velocidad máxima de 201 mph.
El primer “Super Tourer”
Finalmente, Aston ha buscado potenciar el atractivo en viajes largos del DB12 y al mismo tiempo dotarlo de capacidades para enfrentar curvas al nivel de otros superdeportivos. Es por ello que han designado al automóvil como el primer “Super Tourer” del mundo. Para lograrlo, han implementado un nuevo sistema ESC que mejora la respuesta y la agilidad a todas las velocidades. Asimismo, se han mejorado los amortiguadores adaptativos y las barras estabilizadoras más rígidas contribuyen a ofrecer una mayor capacidad.
El chasis de aluminio en sí es un 7 por ciento más rígido. Esto mejora la dinámica y el refinamiento, además de la sensación al tomar las curvas.
Aunque se esperaba un cambio más radical en el Aston Martin DB12, las mejoras son bien recibidas. En cuanto al diseño, queda claro que si se tiene una fórmula exitosa, lo mejor es no modificarla.