El McLaren 720S ha sido considerado una joya automovilística que ha dejado huella en el mundo de los superautos. Sin embargo, su sucesor, el McLaren 750S, redefine todo lo que creíamos saber sobre la conducción de lujo y el rendimiento extremo. Con cambios que, aunque parecen sencillos a primera vista, son el resultado de una ingeniería meticulosa y un deseo constante de superación, este superauto británico ofrece más potencia, menos peso y una aerodinámica refinada que lo elevan a un nuevo nivel.
Uno de los aspectos más destacados del 750S es su impresionante motor V8 biturbo de 4.0 litros. Este potente corazón automotriz no solo entrega 740 caballos de fuerza, sino que genera un torque de 590 libras-pie, lo que se traduce en una aceleración que quitará el aliento a cualquiera. Pero no se trata solo de potencia; el sistema de transmisión de doble embrague de siete velocidades asegura que cada cambio de marcha sea suave y eficaz, manteniendo la velocidad donde debe estar en todo momento.
Además, McLaren ha introducido un nuevo paquete de diseño llamado “Stealth Badge” que añade un toque sutil y elegante con emblemas en color negro. Los detalles, como los guardabarros delanteros de fibra de carbono, no solo embellecen el coche, sino que también mejoran su rendimiento gracias a una reducción de peso clave. Con respecto a la personalización, McLaren Special Operations (MSO) ofrece una gama de opciones que permiten a los propietarios crear un 750S único, con acabados en las pinzas de freno y detalles interiores también disponibles.
El 750S se ofrece en dos variantes: coupé y Spider. La versión coupé es más ligera y por ende es considerada la opción más pura para el entusiasta del rendimiento, mientras que el Spider, con su techo retráctil, brinda una experiencia de conducción al aire libre que muchos conducirían con entusiasmo. Sin embargo, es importante considerar que esta selectividad influye considerablemente en el precio, que comienza en un asombroso $318,085.
Pasando al interior del auto, es fácil notar que McLaren ha optado por la funcionalidad sobre el exceso. Los compradores pueden seleccionar tapicería de cuero auténtico o imitación ante para personalizar su cabina. El diseño, aunque algo austero, está pensado para ofrecer comodidad y un enfoque en la conducción. Por ejemplo, el volante carece de botones, lo que permite que las manos del conductor permanezcan centradas y en control, mientras que los asientos de competición en fibra de carbono brindan un soporte excepcional.
A nivel tecnológico, el 750S está equipado con una pantalla de infoentretenimiento de 7.0 pulgadas que permite acceso a funciones como climatización y audio. Aunque cuenta con compatibilidad con Apple CarPlay, los usuarios de Android pueden sentire en desventaja por la ausencia de Android Auto. Sin embargo, aquellos que deseen disfrutar de su música en alta fidelidad pueden optar por el sistema de sonido Bowers & Wilkins, diseñado para llenar el habitáculo con un sonido envolvente.
McLaren no escatima en la seguridad. Aparte de las características de suspensión adaptativa y sensores de estacionamiento, el 750S viene equipado con múltiples airbags y sistemas de control que ayudan a mantener la estabilidad y la integridad del vehículo en condiciones de conducción extremas.
Al poner el 750S a prueba en carretera, la experiencia es una mezcla perfecta de potencia y control. Su avanzada suspensión hidráulica permite maniobras ágiles, ideal para esas emocionantes curvas de montaña que seguramente disfrutarías al máximo. Además, la funcionalidad del botón que eleva el morro facilita la superación de obstáculos urbanos, algo a lo que muchos conductores de superautos no están acostumbrados.
En resumen, el McLaren 750S es más que un superauto; es una reafirmación del compromiso de McLaren con la excelencia en ingeniería y diseño. Aunque su espacio de carga es limitado, lo que podría obligar a los conductores a contener su equipaje, quienes elijan este vehículo probablemente preferirán enfocarse en la experiencia de conducción pura. Con su mezcla de dinamismo, rendimiento y cierta practicidad, el 750S se perfila como un compañero ideal tanto para el adicto a la velocidad como para el que busca el lujo.
