La historia está repleta de “lo que pudo haber sido” o “qué habría pasado si…”. Este concepto aplica también al ámbito del automovilismo, donde numerosos proyectos jamás vieron la luz del día. Algunos no avanzaron más allá de un primer esbozo, mientras que otros fueron completados sin llegar a competir realmente. Uno de estos casos es el Porsche 9R3 LMP2000, un automóvil de carreras preparado para afrontar el reto de Le Mans, aunque nunca llegó a rodar en el icónico circuito de la Sarthe.
Porsche mantuvo bajo estricta confidencialidad su LMP200 (conocido internamente como 9R3) durante varios años. Según información de Davey Euwema, un reconocido periodista especializado en el mundo del automovilismo, el vehículo rodó recientemente en el circuito de Weissach. Aunque el proyecto del Porsche 9R3 fue finalizado, nunca se hizo realidad en competiciones. Mientras que existe una justificación oficial, también hay rumores que sugieren que el Grupo Volkswagen prefería evitar una competencia directa entre Porsche y Audi.
Porsche 9R3 LMP2000: un motor de Fórmula 1 adaptado
A few more photos from yesterday. Can’t thank @PorscheRaces enough for the opportunity to witness this in person pic.twitter.com/KMUD51bJiU
— Davey Euwema (@daveye97) October 18, 2024
El proyecto inició a finales de la década de los 90, liderado por Norbert Singer y Wiet Huidekoper, conocido por su trabajo en el Lola T92/10 del Grupo C. En 1998, el prototipo fue completado y su diseño fue realizado utilizando CATIA. Sin embargo, faltaba un componente crucial: el motor. Inicialmente, se consideró reutilizar el motor biturbo de 3.2 litros que había triunfado en 1998 con el Porsche GT1, pero se concluyó que era excesivamente pesado y no brindaba la potencia necesaria para competir adecuadamente en su categoría.
Finalmente, emplearon el motor V10 de 3.5 litros que se había desarrollado a inicios de la década para la Fórmula 1, específicamente para el equipo Footwork Arrows. Para marzo de 1999, los ingenieros ajustaron el motor, optimizando su fiabilidad y aumentando la cilindrada a 5.0 o 5.5 litros, además de modificar el sistema de inyección de combustible.
La cancelación del proyecto, impulsada por el Porsche Cayenne
Justo antes de la finalización del vehículo, se tomó la decisión de cancelar el proyecto. El 22 de noviembre de 1999, Wendelin Wiedeking, el CEO de Porsche en aquel momento, anunció que se redirigirían los recursos y esfuerzos hacia el desarrollo del Porsche Cayenne, que debutaría en 2002 y resultó ser un gran éxito para la marca alemana. Sin embargo, circulan rumores que apuntan a que, en realidad, el Grupo VAG no quería un conflicto directo entre Porsche y Audi.
Pese a ello, el equipo responsable del desarrollo del Porsche 9R3 LMP2000 completó el proyecto y se realizaron pruebas durante dos días con los pilotos de prueba Allan McNish y Bob Wollek. Esto privó a la máquina de exhibirse en competiciones, particularmente en la carrera de Le Mans, que fue dominada por Audi con su R8 LMP1 en los años posteriores, obteniendo cinco victorias de seis entre 2000 y 2005.
El motor halló su destino en el Porsche Carrera GT
A pesar de que el Porsche 9R3 LMP2000 nunca llegó a comercializarse hasta muchos años después, su motor sí encontró su hogar. Porsche optó por no regresar de inmediato a Le Mans. En su lugar, se concibió la idea de innovar en el sector de los deportivos, integrando los mejores elementos técnicos del 9R3. Así surgió el Porsche Carrera GT, cuyo primer prototipo fue revelado en París el 28 de septiembre de 2000.
Walter Röhrl llevó al volante del nuevo superdeportivo, aún en fase conceptual, que contaba con un motor V10 situado en posición central y una potencia de 550 CV. Se desplazó por la plaza Charles-de-Gaulle, conocida como la plaza de l’Étoile por su diseño en forma de estrella, con el imponente Arco del Triunfo al centro. Ese motor era el V10 que provenía del 9R3. Finalmente, el modelo definitivo fue presentado en el Salón del Automóvil de Ginebra en 2003.