Después de la Revolución de Terciopelo en 1989, la antigua Checoslovaquia se dividió en dos naciones (República Checa y Eslovaquia) y comenzó a adoptar un sistema parlamentario liberal. Durante este proceso, numerosas empresas fueron privatizadas, siendo Skoda una de ellas, y el gobierno buscó asociarse con una empresa extranjera. El elegido para esta alianza fue Volkswagen en 1990, quien compitió con Renault por adquirir el control de la marca checa. En abril de 1991, Skoda se consolidó como la cuarta marca del grupo alemán, y en 1994 se presentó el primer vehículo de esta nueva era: el Skoda Felicia.
El Skoda Felicia supuso una considerable evolución del Favorit, diseñado por Bertone en 1987. Hizo su debut el 26 de octubre de 1994 en el icónico Puente de Carlos en Praga, aunque la producción había comenzado ya en septiembre en la planta de Vrchlabí, trasladándose posteriormente a Mladá Boleslav el 17 de octubre. Seis meses después, se lanzó la versión familiar.
Skoda Felicia, el inicio de una nueva etapa
El Skoda Felicia contaba con un diseño renovado y un portón trasero de cinco puertas, con unas dimensiones que aumentaban 40 milímetros de largo y 15 milímetros de ancho en comparación con el Skoda Favorit, lo que incrementaba su capacidad de maletero en 21 litros, alcanzando un total de 272 litros. En junio de 1995, se amplió la gama con la versión familiar, que podía alcanzar hasta 4,20 metros de longitud y ofrecía un maletero de 447 litros. Dos meses después, se presentaron las versiones más utilitarias: el Pickup y el Vanplus.
Además, sobre la base del Pickup se fabricaron más de 4.000 unidades del Skoda Felicia Fun, destinado al ocio. Este vehículo singular, en su característico color amarillo, contaba con una configuración de dos asientos delanteros y dos traseros, además de un banco plegable en la plataforma trasera para más pasajeros.
En febrero de 1998 se implementó un significativo restyling, que alineó el diseño exterior del vehículo con el lenguaje estético introducido por el Skoda Octavia en 1996. Con esta renovación, la longitud del Felicia se incrementó en 28 mm, y en 32 mm en la variante familiar, añadiendo también nuevos colores de carrocería y opciones de equipamiento adicionales.
La línea de motores comenzaba con un motor de cuatro cilindros a gasolina de 1.289 centímetros cúbicos, disponible en dos versiones de potencia, 54 y 68 CV. En 1995, se agregó un motor 1.6 MPI de 74 CV y un diésel atmosférico 1.9 D con 64 CV. Al ser parte de la familia Volkswagen, el Skoda Felicia se benefició de la tecnología del grupo, incluyendo ABS, entre otras características.
Primer vehículo bajo el Grupo Volkswagen
El Skoda Felicia fue distinguido como Coche del Año en la República Checa en 1994. Durante su producción, se lanzaron diversas versiones y ediciones especiales. En 1995, se introdujo el acabado Laurin & Klement, y al año siguiente, se presentó la edición especial Atlanta en homenaje a los Juegos Olímpicos de 1996. Entre otros modelos notables, se encuentran Sport Line, Color Line, Excellent, Magic, Family y Mystery, esta última inspirada en el Reloj Astronómico de Praga.
Este utilitario checo reveló su fortaleza, durabilidad y versatilidad también en el ámbito de la competición, participando en el Campeonato Mundial de Rally entre 1995 y 1997 con el Skoda Felicia Kit Car, que montaba motores de cuatro cilindros de 1.3, 1.5 y, posteriormente, de 1.6 litros, este último afinado por el equipo de Skoda Motorsport para alcanzar hasta 176 CV de potencia.
El Skoda Felicia estuvo en fabricación hasta 2001, periodo durante el cual se produjeron un total de 1.401.489 unidades. Este vehículo marcó el inicio de una nueva era para Skoda, siendo el primer modelo desarrollado en colaboración con el Grupo Volkswagen tras la alianza de 1991.
